El ascensor
A los 80 años descubrió que había pasado 7 meses de su vida metido en un ascensor. Siete meses encerrado y tirados por la borda. En la caja maldita no era productivo. No pensaba, no trabajaba, no descansaba, no disfrutaba. Era la culminación de la expresión «no hacer nada». Y, para colmo, aunque lo intentara, en esa prisión ascendente no podía ni tirarse por la ventana. |
Pues cuando descubra los que pasó en frente de su teléfono móvil…
Ufff y si sumamos los que pasamos en el ascensor, más los que pasamos durmiendo, más los que pasamos con el móvil en plan lelos…. ya ni te cuento